Gloria tiene la certeza de que Alberto y Ana están juntos, pero tiene que demostrarlo de alguna forma y para ello pedirá ayuda a su hija Patricia con el fin de hundir los planes de Alberto y hacerse así con el control de las galerías. Sin embargo, esta no será la principal preocupación de Alberto, que ahora debe convencer al famoso diseñador Raúl de la Riva para que, con sus diseños, le ayude a reflotar el negocio..